Los vecinos de Valdefierro se muestra «decepcionados», salvo excepciones, con los primeros días de servicio de las líneas 36 y 38 en el barrio: inicio «caótico» de los cambios en hora punta
El barrio de Valdefierro está estrenando «forzadamente» los recorridos de la línea 38 y la mejora de frecuencia de la línea 36. Tras la retirada de la línea 24, entre Las Fuentes y el barrio, los vecinos de esta zona de la capital aragonesa han tenido que modificar sus itinerarios diarios. En menor medida, han hecho lo mismo los usuarios que antes utilizan el bus en Los Enlaces y la avenida Manuel Rodríguez Ayuso, que afecta a usuarios de Las Delicias, Oliver y zonas como Parque Hispanidad.
Para minimizar las molestias y ofrecer alternativas a Valdefierro, el consistorio ha reforzado la 36 y 38 con dos y cuatro vehículos más, pero, lamentablemente, sobre todo en hora punta, entre las 7:00 y 9:00, dicho refuerzo es inexistente. Más abajo te contamos más detalles.
Aunque todavía no hay datos oficiales completos de los primeros días en servicio de las líneas Ci3 y Ci4, es muy poco probable que ambos servicios estén superando las cifras que tenía la 24, a tenor de que por las nuevas zonas en las que circulan las dos los buses no registran una elevada ocupación. A medio plazo, el consistorio espera mover a 25.000 viajeros medios diarios, una cifra que tendría que ser más elevada en días laborales y lectivos. Recordemos que la 24 movía en un día entre semana normal a entre 28.000 y 30.000 personas y que el año llegaba a los 8,4 millones de usuarios transportados.
Otras cuatro líneas de bus en Zaragoza cambiarán su recorrido: recorridos finales de 30, 32, 33 y C4
El problema de la línea 38 y en menor medida la 36: los buses se incorporan cuando termina la hora punta en Valdefierro
A través de las redes sociales y con mensajes directos de los vecinos las asociaciones vecinales, Valdefierro está vigilando «muy de cerca» la marcha de los nuevos trayectos o refuerzos hasta tal punto de estar en las paradas por la mañana para comprobar si los acuerdos con el consistorio se cumplen o no.
Jesús Picazo, presidente de la asociación de vecinos Aldebarán, declaraba a Onda Cero que el inicio de ambas líneas ha sido «caótico«, ya que en hora punta el bus de la 38 no ha admitido a viajeros y la 36 no ha cumplido sus frecuencias. Por esta razón, han pedido una reunión urgente con la concejal de Movilidad y Servicios Públicos, Tatiana Gaudes.
El Ayuntamiento de Zaragoza ha pedido paciencia a los vecinos, puesto que son los primeros días de puesta en marcha del nuevo cuadro de marchas y los cambios. Aseguran que sí se produjeron saturaciones en la 38 dirección Bajo Aragón, pero que no han sido muchos buses los que han tenido problemas de capacidad. Hay que destacar que, en primer lugar, el acuerdo alcanzando con los vecinos implicaba que ningún bus superara el 80 % de afluencia y que, por otro lado, son los propios conductores quienes deben enviar la información en directo a Cocheras, a través del SAE, cuando en el recorrido se queda gente en tierra.
«Otro día de problemas. Dos buses de la 36 por segundo día consecutivo van seguidos tras esperar 15 minutos en avenida de Madrid«, comentarios como estos, se repiten en redes sociales. «Hemos esperado 16 minutos a las 8:00 de la mañana a la 38, que se ha llenado en Duquesa Villahermosa, con muchos viajeros enfadados en la avenida que se han quedado en tierra», comenta otro usuario en las redes.
Pero ¿por qué se producen los problemas? Más allá de que, como es lógico, dos líneas con peor frecuencia y capacidad que la 24 recogen a miles de usuarios, el problema real está en la incorporación de los autobuses de refuerzo prometidos a las líneas.
En la línea 38, por ejemplo, dos autobuses se incorporan a las 9:32 y las 9:52 horas de la mañana, fuera de la hora punta y desde el Bajo de Aragón, por lo que no llegan a dar servicio a Valdefierro hasta las 10:30 y 10:50. Lo mismo ocurre con otros dos coches asignados: salen a las 8:35 y 8:52 de Cocheras y no llegan al barrio hasta una hora después, cuando la hora punta ya ha pasado.
En la 36 ocurre algo similar. Un bus se incorpora a las 8:28 desde Picarral y no llega al barrio hasta las 9:15, mientras que otro arranca a las 8:28 desde el Puente de Piedra. No sale de Valdefierro hasta las 9:00 cuando ya la mayoría de trabajadores y estudiantes están en destino.
En cuanto a la línea 21, las saturaciones se han agravado, ya que ahora asume a un tipo de viajero que trasborda hacia o desde las nuevas circulares para ir o volver a la zona de Los Enlaces, punto que se ha quedado sin servicio en la línea 24.
Solo hay que estar un rato en la parada de autobús de la avenida de Madrid 134 esquina Rioja para comprobar que las quejas cada hora se cuentan por decenas. «Nos han vendido gato por liebre«, decía una usuaria hace unas pocas jornadas, que destacaba que «ni la alcaldesa ni la concejal utilizan el transporte. Más allá de la calle Rioja se piensan que no existe ciudad. Es un pitorreo descarado todo lo que han hecho«, comenta.
El Ayuntamiento de Zaragoza ha comentado que los primeros días son «complicados» y que podrán actuar en el futuro para mejorar el servicio si fuese necesario. Por otro lado, los vecinos de Valdefierro se reunirán en una asamblea vecinal el próximo martes, 25 de marzo, a las 19:00 horas, en la plaza Armonía.
Quejas en Vadorrey por la supresión de medio centenar de plazas de aparcamiento para poner las paradas de la Circular 4
En la otra punta de la ciudad, en la margen izquierda del Ebro, ya han surgido las primeras quejas por la falta de aparcamiento en el paseo de la Ribera. A través de las redes sociales, algunos vecinos se han quejado que la llegada de las nuevas circulares, que les conectan en 20 minutos con la estación Delicias de manera directa, han supuesto la retirada de 45 aparcamientos en una zona «con gran déficit de huecos«.
La línea Ci4 ha suprimido varios aparcamientos a la altura de la expansión de Vadorrey, junto al Azud, en ambos lados, para que los autobuses pueden maniobrar sin problemas. Lo mismo ha ocurrido a la altura del Puente de la Unión y a la altura de la calle Paniza.
Varios profesionales de Avanza han supervisado durante las primeras horas el cumplimiento de las frecuencias y la afluencia de autobuses en el terminal en este punto. En algunos momentos se han llegado a acumular hasta tres buses articulados de la línea generando problemas puntuales de circulación.