Es un momento histórico en la avenida de Cataluña, tras finalizar la reforma integral, aunque queda una segunda fase pendiente para el resto de 2024: los vecinos celebran los cambios tras años de abandono
Un momento histórico para los vecinos de la urbanización Ríos de Aragón, Cobasa, Santa Isabel y, de refilón, para La Jota. Pese a que todavía queda mucho trabajo que realizar, la avenida de Cataluña ha culminado sus trabajos de reforma tras trece meses de zanjas, máquinas y polvo en el primer tramo.
Ya durante los últimos meses, los vecinos han ido comprobando de primera mano la transformación. También han sufrido cortes de tráfico, prohibición de giros y paradas suprimidas. De hecho, esta semana, muchos habitantes de la zona nos comentaban que tenían muchas ganas de estrenar la reforma tras años de olvido y letargo. «Las obras han sido, como todas, duras, pero sabíamos que el resultado iba a ser genial. Ahora, a por la segunda fase», relataba Carmen, vecina de Cobasa, mientras que Miguel, trabajador de CAF, comentaba que se vive un «momento histórico tras décadas de abandono».
El Ayuntamiento de Zaragoza ha puesto en servicio la reforma integral tras invertir cerca de 4,4 millones de euros del erario público. Unos trabajos que no solo han mejorado la seguridad de la avenida, sino que también han mejorado el aspecto de la antigua carretera nacional a Barcelona. Asimismo, la reforma ha supuesto todo un espaldarazo a la zona, puesto que ya surgen varias promociones de viviendas en diferentes fases de proyecto (ejecutadas, en comercialización o proyectadas).
La inauguración, en la que ha estado presente la alcaldesa de la ciudad, Natalia Chueca, pero también el consejero de Urbanismo e Infraestructuras, Víctor Serrano, no ha sido por todo lo alto, como cabría esperar tras tantos años de abandono. Ambos han recorrido los 500 metros reformados, han retirado alguna que otra valla y, por supuesto, se han realizado fotografías para las redes sociales.
Cómo ha quedado la avenida de Cataluña en Zaragoza y los datos más destacados de la reforma integral de este tramo
La intervención en la avenida se ha producido en 23.890 metros cuadrados de superficie entre el Tercer Cinturón, a la altura del Centro Médico de Especialidades Grande Covián y, por el otro lado, hasta el vetusto fuente del ferrocarril, a la altura de la calle Veintitrés de Abril.
Los vecinos y transeúntes pueden disfrutar de 17 zonas ajardinadas, con bancos y hasta una pequeña área infantil en el lado sur de la avenida. Se han plantado 76 árboles, se han mantenido dos carriles de circulación y, por otro lado, se ha construido un demandado carril bici que mejorará la movilidad de los habitantes que viven, especialmente, al borde de la avenida, en los grandes bloques a ambos lados.
Las aceras también se han ampliado, hasta los 12 metros. Anteriormente, caminar por esta avenida era un «suplicio»: no existían aceras, la iluminación nocturna era escasa o «pobre» y, por otro lado, había bastantes obstáculos (zanjas, baches y postes de iluminación). Así, se gana amplitud y seguridad, ya que ahora las luminarias LED de bajo consumo no dejarán puntos muertos de luz.
Igualmente, la renovación ha alcanzado el subsuelo, con todas las infraestructuras subterráneas reformadas. Se ha cambiado la red de saneamiento, además de instalarse un contador de grandes caudales para registrar el consumo de los grandes sectores industriales anexos.
¿Qué pasará en el futuro en los tramos que quedan sin reformar de la avenida de Cataluña de Zaragoza?
Ahora es turno para ejecutar los trabajos de la rotonda bajo el puente del ferrocarril a Huesca, que permitirá que los vecinos puedan acceder a sus viviendas o trabajos sin tener que ir hasta, prácticamente, el puente sobre el río Gállego.
Cabe destacar que esta avenida de Zaragoza es una de las más largas de la capital aragonesa, con hasta 3 kilómetros de longitud, aunque solo se ha reformado medio kilómetro y queda pendiente la renovación integral desde el puente de las vías del tren hasta el puente del río Gállego que da acceso a Santa Isabel, Movera y Montañana.
En principio, la reforma continuará desde finales de año en el tramo que queda por reformar. Entre la Z30 y la calle Jesús – Balcón de San Lázaro no se espera ninguna intervención a medio plazo.