Varias líneas de autobús sufrieron recortes ya tras las Fiestas del Pilar, mientras que otros cambios (con algunos refuerzos) se producirán desde este 22 de enero
El Ayuntamiento de Zaragoza va a volver a modificar los cuadros de marcha de varias líneas de autobús para «adaptarlos» a la «movilidad real».
Estas modificaciones, que se pondrán en marcha el próximo lunes, 22 de enero, suponen un recorte de frecuencias, los cuales ya se aplicaron en la «primera oleada» de cambios, tras las Fiestas del Pilar, en nueve líneas, y que suponen una destacada disminución de los kilómetros realizados a cambio de dar más tiempo de recorrido a los conductores para realizar cada trayecto.
Es decir, que ante problemas de horarios y falta de tiempo, no se refuerza el servicio, sino que las líneas «se estiran» como un chicle camuflando un severo recorte. Un efecto que provoca varios problemas y pocos beneficios, ya que algunos conductores han asegurado a SoydeZaragoza que algunos cambios ya ejecutados, como los de las líneas 24 y 42, están provocando problemas de ocupación en las horas punta y mayores esperas en las paradas.
Según el consistorio, los primeros análisis de los cambios de las líneas modificadas en octubre han mejorado la regularidad de paso y reducido los viajes de vacío. Sin embargo, lo han hecho recortando frecuencias en uno o dos minutos, lo que supone más aglomeraciones dentro de los vehículos para la misma cantidad de autobuses circulando, algo que se extenderá en varias líneas entre semana y con importantes recortes durante los sábados.
Estas serán las líneas afectadas por los cambios de los cuadros de marcha desde el 22 de enero de 2024
Las líneas afectadas por los cambios en los cuadros de marcha serán la 22, 23, 24, 30, 33, 35, 38, 39, 40, 54, 56, 57, C4, Ci1 y Ci2. Entre semana, los recortes afectarán a las líneas con menos vueltas y ligeros incrementos en la esperas en paradas, pero durante los sábados se eliminan vehículos de muchas líneas, tal y como se especifica en líneas posteriores.
Los cambios se aplicarán a la vez en todas las líneas mencionadas desde el próximo lunes, 22 de enero y, de manera paralela, se trabajará en modificar las frecuencias de las restantes líneas de autobús que quedan por «ajustar».
Sin embargo, durante el fin de semana, los cambios serán más drásticos, ya que las líneas 23, 35 y 38 verán recortado su servicio en dos vehículos, mientras que 22, 24, 32, 33, 34, 39, 40 y C4 (en esta última línea en el día con mayores usuarios en Puerto Venecia) perderán un vehículo por cada línea.
Hay que tener en cuenta que el recorte afecta, precisamente, a cuatro de las líneas más empleadas de la capital aragonesa, la 24, 33, 35 y 39, según ha avanzado el Colectivo Unitario de Trabajadores.
Los recortes en las líneas de autobús que cambiaron tras las Fiestas del Pilar, al detalle
Los cambios aplicados en las líneas de autobús, desde el 16 de octubre de 2023, han provocado una importante disminución de las vueltas que dan los autobuses por la ciudad, afectando además a zonas con una gran demanda de viajeros y dependencia del transporte público como Puerto Venecia. Por cada vuelta se entiende como las veces que un conductor va de un terminal a otro, y vuelve. Es decir, realizar un viaje completo de ida y otro de vuelta sería una vuelta.
Así, la línea 21, ha modificado su servicio en días laborales, pasando de realizar 129 a 124 vueltas completas, mientras que en sábados la frecuencia se ha estirado provocando que durante todo el día se realicen cinco servicios menos. En este caso, los recortes se revierten desde el próximo día 22, ya que se incorpora un vehículo más.
La línea más usada de la capital, la 24, ha pasado los sábados de hacer 115 trayectos de ida y vuelta a 110, lo que supone un recorte de cinco expediciones por sentido. Los domingos se han recortado hasta 8 expediciones, cuatro completas, mientras que entre semana apenas recorta una expedición.
Peor es que el caso de la línea 39 que, durante los festivos, ha recortado su servicio en un 10 %, pasando de 101 vueltas a 92, mientras los sábados ha hecho lo propio de 116 a 109.
Otra de las líneas más empleadas, la 42, ha pasado de realizar 140 vueltas a 130, siendo la primera hora de la mañana la más afectada. Los sábados se ha recortado el servicio de las 81 a las 75 vueltas.
La línea 44 ha reforzado su servicio en apenas una vuelta durante los festivos, pero los recortó de las 92,5 vueltas a las 87 en laborales.
El servicio en Miralbueno, tras la extensión de la 21, también ha sufrido variaciones, en este caso «provisionales» a la espera de que terminen las obras de acceso al barrio, que alteran las frecuencias. En este caso, la 53, ha recortado 4 vueltas en laborales y 1 en festivos.
En cuanto a la lanzadera del tranvía que conecta Valdespartera con Montecanal, línea 55, en festivo, realiza ahora 56 vueltas en vez de las 64 anteriores, mientras que en día laborales su servicio se recorta en un 10 por ciento, pasando de las 51 a las 46 para uno de sus vehículos.
Por último, la lanzadera a Puerto Venecia ha empeorado su frecuencia: pasa de 15 a los 17 minutos entre semana, lo que supone 4 vueltas menos, mientras que los sábados, cuando la afluencia es grande al centro comercial, se recorta el servicio con 6 expediciones menos (3 vueltas). En este caso, el problema es que el autobús pierde la cadencia, ya que los usuarios sabían que esta línea salía cada 15 minutos de sus terminales.
Tres líneas quedarán reforzadas con un vehículo más en días laborales
Desde el lunes, 22 de enero, tres líneas sí verán reforzado su servicio en días laborales tras las quejas remitidas a Movilidad por parte de barrios como Oliver o Rosales del Canal, que aseguraban que las líneas no cumplían sus frecuencias, con grandes esperas en las paradas.
Así, se incorporará un bus más a líneas como la 21 (que recientemente extendió su servicio en los dos extremos), la 30 (entre Plaza Aragón y Las Fuentes) y la 41 (entre Rosales, Montecanal y la Puerta del Carmen). En el caso de esta última línea, la frecuencia quedará reforzada de 15 a 12 minutos cumpliendo así una larga reivindicación de los vecinos del sur de la capital aragonesa.