Dos convoyes inician su periodo «marcha en blanco» en la línea, un término técnico que la mayoría de ciudadanos de Zaragoza desconoce: qué es y cómo puede afectarte
El tranvía de Zaragoza es uno de los medios de transporte de alta capacidad más utilizados de toda España. Al año, mueve cerca de 30 millones de viajeros, una media de unos 110.000 usuarios de media diaria en los días laborales y lectivos.
Ha sido el primer gran medio de transporte en recuperar los viajeros previos a la crisis sanitaria. Posteriormente al Estado de Alarma, los convoyes recuperaron de manera paulatina el número de usuarios, antes que los autobuses urbanos de la ciudad, que se vieron afectados por la huelga más larga de la historia del servicio. Las bonificaciones y la vuelta a la normalidad han provocado un notable incremento de viajeros.
Precisamente, este incremento del número de viajeros transportados, hace que el servicio prácticamente a todas las horas del día se quede corto, con una gran saturación de personas, sobre todo en las horas puntas, de ahí que se solicitaran fondos europeos para incrementar la flota de tranvías y paliaran las aglomeraciones.
Europa concedió financiación para la compra de dos tranvías, por valor de 8,4 millones de euros. Unos tranvías que ya se encuentran en Zaragoza y que en los próximos días iniciarán una «marcha en blanco«.
Qué es la marcha en blanco y por qué es tan importante que se produzca
La marcha en blanco es un proceso fundamental en la puesta en marcha de un servicio ferroviario o tranviario. Durante esta fase, se llevan a cabo pruebas y ajustes para garantizar la seguridad y la eficacia del servicio antes de que comience a operar de manera regular.
Es decir, es la simulación de la marcha comercial que tendrán los tranvías para que estos se preparen a la circulación real en las calles de la capital aragonesa y acaben admitiendo a viajeros.
Así, antes de que los tranvías admitan viajeros, estarán durante unas semanas realizando pruebas reales sobre raíles en el recorrido de la línea, de norte a sur, por los 12 kilómetros que separan Mago de Oz de la avenida de la Academia.
Estas marchas se produjeron en tres momentos diferentes en Zaragoza: en el tramo entre Gran Vía y Valdespartera, antes de ponerse en marcha la primera fase de la línea y, posteriormente, entre Murallas y Gran Vía, antes de ponerse en marcha el servicio por el ‘corazón’ de la ciudad. La tercera fase de la marcha simulada o en blanco se produjeron antes de que los convoyes dejaran subir a viajeros para cruzar el Ebro, a través del Puente de Santiago, y entre Murallas – Plaza del Pilar y Parque Goya, en el segundo tramo.
En qué horarios se producirán las simulaciones y cómo afectarán a los viajeros que vayan a usar el tranvía de Zaragoza
En principio, las marchas simuladas no afectarán al servicio tranviario, puesto que se realizarán durante dos franjas horarias en las que hay menos viajeros y circulaciones de tranvías. Será desde el próximo lunes, 29 de abril.
Los convoyes se probarán desde el inicio del servicio y hasta el inicio de la hora punta matinal, entre las 5:00 y las 7:30 horas de la mañana. En el horario nocturno, las pruebas serán entre las 22:00 horas el cierre de la línea a las 0:35 horas.
No obstante, los usuarios tendrán que tener precaución a la hora de esperar al convoy que sí admita viajeros, ya que los tranvías en pruebas pasarán por las paradas, parando en las mismas, pero sin abrir las puertas. Se recomienda a los usuarios que se alejen del borde del andén y respeten en todo momento la franja amarilla.
Además, el usuario tendrá que tener en cuenta que no se podrá subir a estos dos tranvías, por lo que si está en la parada tendrá que esperar a que pase el Urbos III, el convoy de siempre que estará lleno de viajeros.