La capital aragonesa no aplicará un descuento adicional, pese a que la mayoría del resto de grandes ciudades sí lo harán o han tomado otras medidas
Zaragoza rebajará desde septiembre y hasta el 31 de diciembre el precio del transporte público urbano. Sin embargo, se quedará en el tope mínimo establecido por el Gobierno de España (30 %). El consistorio no incrementará la subvención, la cual estaba abierta a que alcanzara el 50 %. Así, la capital aragonesa se queda sola entre las grandes capitales del país, puesto que todas ampliarán la rebaja y, en caso de que no, completarán el descuento con otras medidas tomadas recientemente para proteger a las familias ante la subida de la inflación.
Desde el 1 de septiembre, el coste con tarjeta bus quedará fijado en los 0,53 € por cada viaje realizado, trasbordo incluido, mientras que los abonos descenderán en la misma línea. Por ejemplo, el precio del título mensual con viajes ilimitados en 30 días por toda la red urbana y rural pasará a costar 28 desde los 40 €.
Lo mismo ocurrirá con el transporte interurbano por autobús, dependiente del CTAZ (DGA), cuya rebaja no se verá incrementada al 50 %. Así, cada viaje pagado con Lazo o abono integrado en la misma tarjeta tendrá un descuento directo con el tope mínimo establecido desde el Ministerio.
Qué están haciendo otras ciudades españolas
Todas las ciudades mayores o de tamaño similar a la nuestra han anunciado que ampliarán la rebaja al 50 %. En el caso de Sevilla y Valencia, que se quedarán en el 30 %, ya han optado previamente por medidas importantes que han rebajado el coste del transporte. A continuación, detallamos qué están haciendo el resto de ciudades en materia tarifaria durante estos meses.
Madrid
La capital española, crítica siempre con las medidas anunciadas por Sánchez, dejará el coste del transporte a la mitad tras rectificar la idea inicial de no hacerlo. Por ejemplo, el abono joven pasará a costar 10 € mensuales, una medida muy aplaudida al permitir viajes ilimitados por toda la Comunidad de Madrid y en todos los medios de transporte a todos los jóvenes desde los 14 a los 26 años.
Además, los abonos mensuales para la tercera edad tendrán un coste de 1,60 €, mientras que el abono para la zona A será de 27,30 €.
Barcelona
La capital condal, junto a la ciudad metropolitana vecina más importante, L’Hospitalet de Llobregat, que pertenecen a la Autoridad del Transporte Metropolitano, sí complementará el descuento del Gobierno. Sin embargo, lo aplicará a los usuarios más fieles: el título más usado, la T-usual, pasará de 40 a 20 euros, mientras que los descuentos también se extenderán a las tarjetas jóvenes, familias monoparentales o numerosas, entre otras.
Valencia
La capital del Turia no bonificará más sus abonos multiviaje. Sin embargo, ya aplicó mejoras tarifarias al arrancar el 2022 que han hecho que los usuarios estén pagando un 50 % menos en el transporte metropolitano y el Metro de Valencia. Potenció la integración tarifaria, una asignatura todavía pendiente en la capital aragonesa.
Sevilla
A orillas del Guadalquivir no se aplicará una rebaja mayor. La capital andaluza será la única de las grandes, junto a Zaragoza, en aplicar el descuento mínimo. El precio medio del viaje quedará cerca de los 0,39 euros.
Málaga
La segunda ciudad más importante de Andalucía rebajará el transporte en un 35 y 40 %. Cada viaje con trasbordo costará 0,55 €, una cantidad similar a la de Zaragoza. Además, la tarjeta de jóvenes y estudiantes costará 17 € mensuales, 10 € menos.
Bilbao
Tanto el Metro de Bilbao, el tranvía como los autobuses públicos urbanos y metropolitanos de Bilbao verán su coste rebajado al 50 %. La extensa red bilbaína de Metro podrá ser usada por 0,48 € en una zona, mientras que los viajes pagados con la tarjeta Gizatrans (pensionistas) costarán apenas 0,19 €. Los viajes en Bilbobus serán de 0,33 € por viaje para los usuarios que dispongan de la tarjeta Barik, similar a la de BUS de Zaragoza.
El Ayuntamiento de Zaragoza dice «no poder» incrementar el porcentaje de bonificación
El Ayuntamiento de Zaragoza dice que «no puede» incrementar la bonificación al 50 %. La concejala de Movilidad y Servicios Públicos, Natalia Chueca, considera que el consistorio ya hace un importante esfuerzo al sufragar el 60 % del coste del servicio, el cual está afectado también por la inflación y la pérdida de usuarios provocada por la pandemia.
Sin embargo, aunque los usos siguen un 20 % por debajo de lo que era normal antes del Covid-19, hay que tener en cuenta que se está produciendo un ahorro de kilometraje en el transporte público por la huelga (que ya roza las 600 jornadas) que, además de afectar a la calidad de este servicio público y al tiempo de desplazamiento de los ciudadanos, provoca que la facturación de la contrata quede reducida y, con ello, el déficit del servicio.
El Ayuntamiento recibirá 4,2 millones de euros del Gobierno de España por la bonificación del 30 %, aunque advierte que las cuentas «no cuadran»: se tendrán que asumir 1,2 millones más del presupuesto municipal, según los cálculos realizados por los técnicos de movilidad. La incógnita estará en la recuperación de los usos, viendo si esta caída del coste de los títulos significará que más personas usen el transporte y por ende se reduzca el déficit acumulado.