Albatros es el nombre de este valiente perro que se ha convertido en el primer can entrenado para detectar posibles trampas con veneno, en las más de 200 zonas verdes que tiene la ciudad de Zaragoza.
Un miembro del Centro Municipal de Protección Animal de Zaragoza lo encontró abandonado en la calle, en al año 2014, y desde entonces este cachorro, de raza Border Collie, ha sido adiestrado para localizar elementos químicos o venenos. Algunas personas sin escrúpulos los ponen dentro de alimentos que dejan en parques y zonas verdes, y que los perros pueden ingerir cuando salen a pasear con sus dueños.
La gran labor de Albatros y de su entrenador, Alfonso Martínez, los han hecho merecedores de varios premios, entre ellos el premio del Ilustre Colegio de Veterinarios de Zaragoza. Su educador explica que es un perro muy nervioso, motivo por el que cree, pudo ser abandonado. Precisamente, la inquietud de este animal ha sido fundamental en su proceso de adiestramiento, y en su rápido aprendizaje para detectar los venenos.
Tanto la educación como el entrenamiento de estos perros son largos y la clave está, según Martínez, en convertir el rastreo en un juego. De esta manera cada vez que Albatros detecta algún elemento sospechoso se tumba cerca sin tocarlo. Diariamente pasean por varias zonas verdes de la ciudad y si no localiza nada su entrenador le coloca un cebo falso para que no se desanime y siga motivado.
En los últimos años esta peligrosa práctica ha aumentado en la ciudad de Zaragoza, por eso desde la Protectora necesitaban un perro capaz de identificar todos estos venenos y evitar que otros los puedan ingerir.
La Protectora van a poner en marcha nuevos entrenamientos para formar a otro perro. Esta vez para enseñarle a localizar objetos metálicos dentro de la comida. Junto con los raticidas ha aumentado la aparición de objetos punzantes, como chinchetas o puntas metálicas, dentro de distintos alimentos conllevando un grave riesgo para la salud de las mascotas. Pronto Albatros tendrá un nuevo amigo, y juntos salvarán las vidas de sus compañeros caninos.